Los últimos días de diciembre, el Cerro de la Gloria revivió porque contó con la inauguración de La Arboleda, el multiespacio gastronómico que se proyecta desde hace 2 años. El proyecto surge de la Dirección Parques de la Provincia que quiso reemplazar la precaria y antigua unidad de servicios por algo moderno y acorde con la importancia mundial del monumento a la Gesta Libertadora. La licitación que abre la provincia fue otorgada al empresario mendocino José María Amoretti, quien lleva más de cuatro décadas trabajando en los rubros de las máquinas expendedoras de café y de la seguridad electrónica. Su espíritu inquieto y emprendedor lo llevó a explorar el rubro gastronómico con un gran proyecto. “Creímos en el proyecto. Fuimos los únicos porque nadie se quiso arriesgar a la inversión. Nosotros lo hicimos porque estamos orgullosos de nuestra provincia y el legado sanmartiniano” manifestó Amoretti.
De esta manera, en la cima del Cerro de la Gloria ahora funciona el restaurante La Arboleda, que busca ser una atracción turística promoviendo la épica y los valores sanmartinianos. Una edificación monumental con escalinatas, terrazas, servicios y cava emerge aportando una gran luminosidad a un sitio que estaba cayendo en el abandono.
La Arboleda, Mirador a la Gloria trata de 4 sectores. El primero es una barra de expendio de comida rápida, take way para los visitantes que vienen en buses a encontrarse con el Momento al Libertador. El segundo es un salón donde funciona el restaurante con minutas y comidas típicas mendocinas que tiene la particularidad de poseer tres frontales vidriadas que se pliegan y se integra con la naturaleza y los árboles añosos quedando en la ladera del cerro. La tercera es la terraza con una gran vista que permite disfrutar en las noches con tragos y comidas, además ser el sitio de los sunset con la mejor puesta de sol de la ciudad.
“El espacio tiene una unidad con baños automatizados para todo público, cocina de primer nivel salón con vidrios que se pliegan y se integran a la naturaleza. La propuesta gastronómica cuenta con una barra de comida rápida y el salón con comidas más mendocinas usando productos regionales” explica Amoretti y agrega: “La propuesta turística es usar el mapping que se proyecta sobre el monumento y completarlo con espectáculos folklóricos para los turistas”.
El proyecto gastronómico está concatenado a uno cultural con el objetivo de que el turista pueda vivenciar al Padre de la Patria desde su principal monumento. “Nuestro proyecto no es solamente gastronómico, también es cultural, porque queremos dar a conocer y resaltar la mística de nuestro máximo prócer”, explica el inversor con orgullo inocultable que exhibe a través de su rostro sonriente.