El proyecto nace en el 2017 con una madre y una hija que se unen para conseguir 50 mochilas, esas se convierten en un mucho más, sumando gente para gestionar las donaciones de la mejor forma. El proyecto tiene la particularidad que se dona una mochila con útiles a un niño determinado que el donador identifica con su nombre, apellido, grado y escuela.
“Esto hace que se genere una empatía y hasta un vínculo sin conocerlo. Eso genera ilusión en los donantes” comenta Agustina Debernadi, parte del equipo de Proyecto Mochi, quien asegura que llevan entregadas 20 mil mochilas desde el inicio.
La inscripción de escuelas comienza en noviembre con un máximo de 50 niños por entidad para lograr abarcar toda la provincia. Los organizadores detectan que este año cuenta con escuelas variadas desde rurales y urbanas marginales como también del Sur y del Este mendocino.
“Nos ha pasado que donantes se comunican con la escuela y la entrega es aún mayor con personas que generan esa empatía y han regalado a los niños bicicletas, Tablet o ropa por ejemplo. Muchos quieren acercarse a la escuela o les dejan cartas dentro de las mochilas”, agrega Debernadi.
Para realizar donaciones comunicarse con las redes sociales @proyectomochimendoza