La Bodega Alta-Yarí ha sido reconocida como "Bodega del Año" en el informe “Argentina 2025” de la prestigiosa Guía Descorchados 2025 del influyente crítico y periodista chileno Patricio Tapia. Este reconocimiento consolida a Alta-Yarí como un referente de la vitivinicultura argentina, destacando su compromiso con la excelencia y la interpretación única del terroir de Gualtallary, Valle de Uco.
Además, el Alta-Yarí Gran Calcáreo Malbec 2023 ha sido galardonado con 99 puntos, ubicándose entre los mejores tintos del año en la Guía. Este excepcional vino expresa con claridad la singularidad del suelo calcáreo de Gualtallary y el carácter extremo del viñedo de Alta-Yarí, plantado entre los 1350 y 1580 metros sobre el nivel del mar.
Según Tapia, el Alta-Yarí Gran Calcáreo Malbec 2023 es un vino que logra transmitir su origen con inusual claridad, revelando notas de hierbas de montaña, frutas rojas salvajes de los Andes y una textura rugosa, similar a la tiza, proveniente de los suelos de cal. Su acidez vibrante, marcada por la altura extrema de su viñedo, lo convierte en un tinto que va más allá de la variedad, logrando un profundo sentido de lugar.
Asimismo Tapia elogió al Alta-Yarí Gran Torrontés 2024, describiéndolo como un blanco de montaña con carácter único, perfumado y de acidez incisiva, reflejo del rigor del clima de montaña. Este vino, que forma parte de un portafolio brillante y diverso, captura la esencia de su entorno, combinando frescura y complejidad en cada copa.
Alta-Yarí: una bodega con visión global y raíces en el terroir
Alta-Yarí es un proyecto nacido hace más de una década de la mano de Hervé Fabre, en colaboración con inversionistas argentinos y extranjeros, y con la dirección enológica de Juan Bruzzone. Su finca de 220 hectáreas en Gualtallary se distribuye en pequeñas parcelas a lo largo de las Lomas del Jaboncillo, permitiendo interpretar cada microterroir con precisión.
El reconocimiento de Descorchados 2025 subraya la evolución de los vinos de Alta-Yarí y el trabajo minucioso de Fabre y Bruzzone, quienes han sabido leer y traducir el carácter del terroir en cada botella, consolidando el prestigio de la bodega a nivel nacional e internacional.
Este galardón reafirma la identidad de Alta-Yarí como un referente del vino argentino, una bodega que combina innovación, tradición y respeto por la tierra, llevando la excelencia de Gualtallary a los mercados más exigentes del mundo.