La situación llegó a convertirse en extrema para los rubros vinculados al público infantil en las últimas semanas. Los peloteros y jardines maternales dan cuenta de las dificultades que atraviesan frente al mantenimiento de las restricciones absolutas para sus sectores, la incertidumbre por la extensión de la medida y la falta de acceso a beneficios para ambos sectores.
Así como se cuentan día a día los contagios por coronavirus, las cámaras que nuclean a estos dos rubros comenzaron a contar las bajas que se vienen produciendo. “Ayer cerraron dos más, antes de ayer uno, y ya suman 23”, reflejó Roxana Carro, una de las miembros de la Asociación de Jardines Maternales de Mendoza.
La misma situación reflejó Javier Pérez Braga, de la Asociación de Propietarios de Peloteros: “Todos los días son más las familias que se van quedando sin su fuente de ingreso”, señaló. Es que, en promedio, por cada pelotero trabajan tres personas, con lo cual el impacto por cada baja se triplica en familias.
Esta semana la asociación de jardines maternales elevó un nuevo reclamo (con concentración incluida) a la Casa de Gobierno. El panorama es complejo. “La agrupación cuenta con unos 150 jardines, de los casi 300 que hay en la provincia. Y entre los que nucleamos ya han cerrado 23”, relató Carro. Esto significa que más del 15% (pero del 50% del universo) no pudo seguir sosteniendo la situación frente a las consecuencias que implica llevar más de tres meses cerrados y sin perspectivas de abrir en el corto plazo.
En el mismo sentido, Florencia Pedraza, miembro de la asociación, señaló: “Estamos particularmente en una etapa crítica. Cerraron jardines con más de 30 años de trayectoria que no pudieron hacer frente a esta situación”.
“No tenemos ningún tipo de ayuda. Menos del 10% de los miembros de nuestra asociación pudieron acceder a la ayuda de ATP, que cubre la mitad del sueldo de los empleados”, señaló.
“La situación es muy grave: tenemos que pagar alquileres que son altos, impuestos, servicios, y muchos no lo están pudiendo hacer con lo cual acumulan deudas”, expuso Pedraza.
“Nos hemos reunido incluso con el vicegobernador, pero hasta ahora no tenemos respuestas. Nosotros no estamos pidiendo abrir mañana como si nada pasara, de una manera irresponsable. Hemos elaborado protocolos basados en los de otros países y asesorados por profesionales. Pero no tuvimos devolución”, agregó la co-directora del jardín Meta “Educar en libertad”.
Además, sostuvo que el panorama es de total “incertidumbre” para este rubro. Sin embargo, advierte que para muchos padres es necesario que se retomen las actividades de los jardines ya que progresivamente la gente está volviendo a trabajar y deben resolver el cuidado de los niños.
Por su parte, Pérez Braga confirmó que en toda la provincia cerraron más de 15 peloteros en los últimos días, aunque estima que el número es mayor.
En la agrupación que lidera están participan propietarios de 120 peloteros de gran parte de la provincia, pero advierte que hay muchos que aún no se sumaron.
“Algunos estamos tratando de sobrevivir. Los que estamos aguantando son a los que nos han contemplado el pago de los alquileres, sino no tenemos chances de seguir”, sostuvo.
“La situación es muy complicada. Pedimos poder abrir pronto o algún tipo de ayuda económica porque esto es insostenible y no tenemos la capacidad para aguantar mucho más”, lanzó Pérez Braga. “Es muy difícil poder mantener una actividad sin ingresos, pero no tenemos respuestas todavía”.
Además, aseguró que los peloteros “tienen la misma capacidad para trabajar que un bar o un restaurante. Además, contamos con la ventaja de que a un cumpleaños la mayor cantidad de gente que asiste son familiares”.
“Hoy los niños pueden ir a un restaurante, pueden salir al centro, incluso pueden ir a un supermercado sin ningún tipo de control. Por eso nos sentimos discriminados”, cuestionó.
La situación los llevó a tener que generar alternativas frente a las personas que habían señado eventos pero que no pudieron realizarse por decretarse la cuarentena: “Les estamos ofreciendo trasladar esa seña a cualquier persona y va a tener vigencia durante todo un año desde el momento en que nos habiliten”, comentó Pérez Braga.
Protocolos estrictos
Como cada sector que quiere reabrir, tanto jardines maternales como peloteros elaboraron protocolos sanitarios que fueron presentados a las autoridades provinciales. “Nuestra situación es muy distinta a la de los colegios, tenemos una matrícula mucho más pequeña y cualquier situación es manejable”, destacó Pedraza por el lado de los jardines maternales. “Entendemos que la situación sanitaria es crítica, pero se pueden aplicar protocolos estrictos. Nosotros ya los hemos presentado y aguardamos las respuestas”, sostuvo.
Mientras que desde los peloteros advierten que podrían ser tomados como “prueba piloto para evaluar la situación de las escuelas. Nosotros propusimos trabajar con el 50% de la capacidad, efectuar desinfecciones completas que nos llevarían una hora entre cumpleaños y cumpleaños, llevar una planilla como la de los restaurantes, los niños deberían llevar el barbijo durante todo el evento”, sostuvo.
El panorama para ambos rubros es muy complejo y esperan que alguna respuesta oficial pueda surgir por estos días. Sin lugar a dudas están entre los grandes sectores que más están perdiendo en esta pandemia.