Banco Macro junto al Centro de Entrepreneurship del IAE Business School, la Escuela de Negocios de la Universidad Austral, realizaron en Torre Macro la premiación de la Edición 2021 de NAVES, el programa que apoya a emprendedores y PyMEs de todo el país para que puedan desarrollar sus proyectos y fomentar el crecimiento de las economías regionales.
El Centro de Entrepreneurship del IAE lleva adelante el Programa NAVES desde el año 1999 y desde el año 2015 y gracias al apoyo de Banco Macro, logró extender su impacto y llegar al interior del país.
Por séptimo año consecutivo, Banco Macro financió el 100% del Programa Naves Federal en cada una de sus etapas.
La entrega de premios se realizó de forma presencial en Torre Macro, respetando todos los protocolos sanitarios vigentes. Participaron los 16 equipos finalistas, autoridades del IAE y de Banco Macro, miembros de la distinguida red de apoyo del IAE, jurado del programa NAVES, prensa e invitados especiales.
El evento fue conducido por el periodista Guillermo Mazzuca y contó con la participación de Patricio Jutard, co-fundador y socio de MURAL uno de los recientes unicornios argentinos y de Newtopia VC, quien compartió su testimonio y experiencia emprendedora e innovadora junto a los flamantes ganadores de la edición.
Nexeaa quedó entre los 16 equipos finalistas que fueron los seleccionados entre los casi 4.000 emprendedores inscriptos en NAVES 2021 representando a cientos de Pymes y startups de todo el país.
Este año se presentaron más de 1.500 proyectos de temáticas relacionadas con la industria de servicios, financiera, salud, tecnología, agro, gastronomía, turismo, reciclado, energía limpia, etc.
Con el objetivo de sostener la federalización del programa, Banco Macro invirtió desde el año 2015, más de $ 80 millones, lo que permitió que aproximadamente 9.600 emprendedores del país puedan acceder a NAVES Federal de forma totalmente gratuita.
Nexeaa el proyecto ganador de Mendoza busca construir una planta piloto para la producción de Bioetanol a partir de la fracción orgánica de residuos sólidos urbanos (FORSU) que permita fomentar el aprovechamiento del valor intrínseco de la FORSU para favorecer simultáneamente la disminución del volumen de material descartado y la generación de productos de alto valor que fomenten el desarrollo tecnológico y económico regional. Se busca así mismo, que a través del desarrollo piloto se aprecie la potencialidad y eficiencia de este proceso productivo para luego escalar a nivel industrial y promover un modelo de desarrollo basado en la economía circular que considere los residuos como recursos.