Aún cuando era una asignatura pendiente, fruto de la pandemia mundial y del nuevo contexto generado, en los últimos meses las organizaciones tanto públicas como privadas, han debido llevar adelante una rápida digitalización y adaptación de sus procesos de trabajo para poder amoldarse al escenario actual. Frente a esta nueva realidad y ante los desafíos que vendrán en la llamada ‘era post Covid’ surge el interrogante sobre el papel de la formación que deberán tener quienes comanden estos espacios de trabajo. ¿Existen ejecutivos realmente capacitados? ¿Qué habilidades son las necesarias para salir airosos de este panorama?
Para responder estas preguntas, la palabra de Ricardo Greco Guiñazú, fundador y presidente del Grupo educativo formado por ADEN Business School, ADEN University y ADEN School of Government, es sin duda un acierto al momento de conocer sobre la formación ejecutiva tanto en Mendoza como en su inserción a nivel mundial.
Tres décadas de expertisse en la educación ejecutiva
Sin duda que los casi 30 años de trayectoria de ADEN como una de las principales escuelas de negocios y su expansión internacional en países como España, Estados Unidos (Miami) y toda Latinoamérica, ha llevado a esta marca a ejercer un liderazgo absoluto en materia de formación ejecutiva permitiendo que en estas casi tres décadas, se haya logrado crear una red de más de 70 mil ejecutivos de excelencia en todo el mundo.
Solo como dato, en la reciente edición marzo/abril 2021 de la revista Forbes, se dio a conocer a las 68 empresas con mejor reputación de Centroamérica, ubicando a esta Escuela de negocios entre las 10 empresas con mayor reputación de países como Panamá.
“Dentro del ADN de ADEN está el crecer. Hemos ido compartiendo éxitos con derrotas pero el balance es altamente positivo. Desde el principio nuestro objetivo fue profesionalizar la gestión en términos generales, y creo en buena medida que lo hemos logrado cubriendo la grieta entre el graduado de las universidades mendocinas y lo que necesitaban las empresas locales y a los perfiles que buscaban las empresas locales. Y es que evidentemente, las universidades de la provincia forman muy buenos técnicos pero continúan teniendo una carencia importante como es la de formar buenos gerentes”, señala Greco Guiñazú. “En algún momento, las universidades deberán adaptarse a lo que realmente necesita el medio, más allá de lo empresarial, alineando las carreras y el tipo de profesionales que forman con lo que se demanda para que no exista esa desilusión que tienen muchos egresados que no saben qué hacer cuando llegan a una empresa y no tienen los niveles de competencias necesarias”, enfatiza.
¿Cómo vino a modificar la pandemia a la educación ejecutiva?
Creo que la pandemia ha sido un magnífico despertador y disparador para que la educación cambie y se adapte a las necesidades individuales de las personas en cuanto a contenidos, a ritmo de cursados, a formas de aprender. Hay muchas herramientas propias del E-learning que van ayudar y también tecnologías como la realidad virtual, la analítica de datos que ya están uniendo a las plataformas para que se adapten a estas necesidades.
En este contexto y siendo una de las escuelas de formación ejecutiva más importantes, ¿cómo estaba ADEN al llegar esta pandemia y cómo actuó ante los cambios que trajo aparejados?
Nos tomó muy bien parados porque desde hace más de 10 años veníamos desarrollando el E-learning aunque al inicio de la pandemia, este no significaba más del 30% de ingresos de ADEN. Además ya contábamos con un alto nivel de programa de carreras, licenciaturas y MBA y cursos especializados de forma digital que si bien al momento de la pandemia no tenían mayor representación, luego explotó y en la actualidad y tras derrumbarse todo lo presencial, representan el 100% de nuestros ingresos.
¿Entonces el E-learning llegó para quedarse?
Creo que las plataformas de E-learning van a ser las que tomarán el rol central en la educación mientras que las instancias presenciales serán a modo complementario sobre todo en educación ejecutiva.
Y en cuanto a las capacidades que requerirán los ejecutivos para dirigir equipos y sobrellevar esta crisis, ¿están preparados?
Considero que van a existir cambios y muy fuertes. Las llamadas ‘habilidades blandas’ van a ser cada vez más importantes que justamente son las que no consideraron las universidades. Ahora todos estos temas emocionales ligados al liderazgo, a la estabilidad propia de cada individuo se ha hecho central sumado a todas las habilidades digitales que se necesitan para cambiar a las organizaciones… ¡no pueden seguir siendo marginales! Era una necesidad a grito desde hace mucho tiempo y que las empresas venían pateando para adelante y hoy - por la pandemia- se ha hecho una necesidad imperiosa que debe afrontarse.
En el caso de ADEN fuimos precursores en este ámbito de las habilidades blandas donde tienen una capacitación muy fuerte, es más, dentro del recorrido del MBA, contamos con un 25% relacionado con ellas en comparación a otras escuelas de negocios lo cual fue revolucionado en su momento. Hoy, hemos consolidado esta dirección y también buscamos agregar contenidos sobre temas digitales con una alta actualización a los fines de no permitir que queden obsoletos.
¿Y las empresas mendocinas están adaptándose a este nuevo escenario?
Creo en la resiliencia del mendocino para adaptarse rápidamente a los cambios, será tal vez porque venimos del desierto y sabemos superar la adversidad y en ello considero que las empresas van a ser capaces de sobrevivir porque lamentablemente en este contexto el que no se adapte rápido perecerá no quedando otra alternativa. Y en este sentido, la transformación digital es un proceso que no surge espontáneamente, sin embargo, todos han visto la necesidad imperiosa de adaptarse ya y no como algo lejano. Confío en el ADN mendocino para superar esta crisis.
¿Cómo se plantea el futuro de la educación ejecutiva post Covid?
Vamos inevitablemente hacia un blend, un mix entre lo presencial y lo online. No creo que la gente se vuelque decididamente a alguno de ellos y en donde las plataformas poderosas unidas con grandes aplicaciones van a reinar. No obstante el networking será muy importante ya que las plataformas no han sabido suplir la experiencia que da la presencialidad, el ‘face to face’ es determinante a la hora del networking y el contacto personal en el ámbito de los negocios, es fundamental.
Desde ADEN vamos a contar con una oferta más amplia de todos tipos de programas de capacitación ejecutiva sobre todo porque Internet ha borrado las barreras geográficas y hoy por hoy, uno cuando está en Mendoza, se nutre del mundo y en este sentido, nuestra escuela de negocios va a tener que estar a la altura de lo que pasa, saliendo de lo estrictamente local y trascender en un escenario mundial, competir contra el mundo nos hará más competitivos, más ricos y vamos a poder brindar un mejor servicio al consumidor final, es decir, a los alumnos estudiantes.