“La finalidad es dar una experiencia nueva. Es ver Mendoza, la montaña y sus viñedos desde arriba, logrando una óptica diferenciadora” comienza explicando Patricio Mac Keon de Helitronador quien se aseguró la legitimación para volar por cielos mendocinos ya que no hay reglamentación para esta actividad en la provincia.
La propuesta está dividida en tres partes: vuelos cortos o llamados “vuelos bautismo” que permite sobrevolar viñedos, bodegas, el dique Potrerillos entre otros. “Hemos llegado a un acuerdo con algunas bodegas para que actúen como helipuertos y bajamos en medio de sus viñedos, en espacios acondicionados para un óptimo descenso” comentó Mac Keon. De esta manera, se sobrevuelan viñedos en el Clos de los Siete con descenso en Bodega Diamandes y en Andeluna en un paseo de 20 minutos que tiene un costo de $ 10.000 por persona.
La segunda propuesta está vinculada al traslado ya que en la zona las distancias son largas, el tiempo valioso y la gente que se mueve laboralmente por esta zona cuentan con un servicio premium que agiliza los trechos. Finalmente ofrecen los vuelos a medida, conformando un paseo determinado ya sea Uspallata, Potrerillos, etc. siempre con la limitación del helicóptero tanto climáticos como de altura. “Se pueden hacer como una experiencia especial, para aquellos que quieren conocer otros lugares” comentó Patricio.
“Hay muchas variantes en este negocio. Si bien venimos de Bariloche este es un mundo diferente” Allá son vuelos que salen de una base con 5 paseos específicos. Acá es mayor la expectativa y la cantidad de sitios a recorrer” comentó Patricio Mac Keon y agregó: “El éxito de Mendoza es notorio. Tiene un poder adquisitivo que creo debe ser el más alto del país. Un público diferente que disfruta. La gente está con otros tiempos, el turismo que elige la provincia es de alto consumo y cuando vuelvan los extranjeros este tipo de servicio son cotizados”.
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