Si bien el relevamiento se centra en la región metropolitana de Buenos Aires, la dinámica se replica –con matices– en provincias como Mendoza, donde las familias vienen sintiendo de lleno el impacto del ajuste tarifario.
Mendoza: salarios tensionados y más presión sobre el gasto familiar
En nuestra provincia, los hogares destinan cada vez una porción mayor de sus ingresos a cubrir servicios básicos. El efecto es doble: por un lado, la quita de subsidios nacionales en electricidad, gas y transporte; por otro, la presión de una inflación que no cede.
A modo de referencia, la canasta que en el AMBA representa el 11% del salario promedio registrado, en Mendoza pesa aún más sobre los bolsillos de los trabajadores privados, que perciben remuneraciones por debajo del promedio nacional. El transporte público, que en Buenos Aires absorbió el 43% del gasto de servicios en septiembre, también es un rubro crítico en el Gran Mendoza, donde la actualización del boleto impacta de lleno en sectores de ingresos medios y bajos.
Tarifas y consumo: el ajuste energético local
Las boletas de energía eléctrica y gas natural en la provincia acompañan la tendencia nacional, con aumentos interanuales superiores al 20%. Para un hogar mendocino de consumo medio, cubrir servicios de luz, agua, gas y transporte puede significar hoy más de un tercio del salario mensual, dependiendo del acceso a subsidios.
“Lo que muestra el informe de la UBA es apenas la punta del iceberg. En provincias como Mendoza, con sueldos promedio más bajos que en Capital, el peso de los servicios sobre la economía familiar es aún más fuerte”, coinciden economistas locales consultados por InfoMendoza.
Mirada hacia adelante
El informe de la UBA también analizó el proyecto de Presupuesto 2026, que prevé $ 11,4 billones destinados a energía y transporte, cifras que mantienen la incidencia del gasto en subsidios sobre el PBI. Esto abre interrogantes sobre cómo se sostendrá la política tarifaria en el próximo año y cuánto de ese costo será trasladado a los hogares.
Para Mendoza, donde la economía familiar ya está ajustada entre aumentos de alimentos, transporte y tarifas, la discusión sobre subsidios y paritarias será clave en lo que resta de 2025. La fotografía que muestra el AMBA es apenas un anticipo de la película que también se proyecta en nuestra provincia.