La venta de vehículos cada vez encuentra nuevas formas de llevarse a cabo, especialmente utilizando los avances de la tecnología y dejando de lado los pormenores que acarrean las formas tradicionales.
Teniendo esto en cuenta y sumados otros factores, surge Cárbula, una plataforma de servicios diseñada para que la gente pueda vender y comprar autos usados de una forma fácil, segura y al mejor valor del mercado.
Esta joven y ambiciosa empresa opera en Mendoza y Chile, actualmente lleva transaccionados más de US$ 2.000.000 y más de 200 vehículos vendidos.
Para conocer más a fondo cómo nace y funciona esta empresa, InfoMendoza dialogó con Martín Salassa, co-founder de Cárbula.
Conociendo a Cárbula
A finales del 2018, Martín Salassa, junto a su amigo Nicolás Ochoa, fundan Cárbula. Esta idea toma cuerpo y acción una vez que ambos pasaran por una experiencia ligada al mundo del financiamiento automotor. El paso por esta actividad les hizo ver desde una perspectiva totalmente distinta cómo es el mundo de comprar/vender un auto de manera particular.
“Después de ver todo esto, nos sentamos a pensar con mi amigo Martín cómo podíamos solucionar o mejorar los puntos de fricción en lo que es la experiencia de compra/venta, puntualmente desde la vista del vendedor. Vimos que a la hora de comprar hay mucha oferta, pero a la hora de vender no”, recordaba Martín.
Teniendo esta premisa, la dupla comenzó a realizar pruebas. Como ambos vienen del sector de la tecnología, pensaron un algoritmo que se encargara de reunir los datos de un vehículo, pasando por portales de venta y otras referencias más para poder obtener una lógica de cuál es valor real en calle de ese producto.
Una vez que obtuvieron los datos que buscaban, comenzaron a probar el servicio para dueños de autos que querían vender. “Le empezamos a decir al dueño de auto que hay otro camino que está en el medio, en el medio de vender auto por cuenta propia o entregarlo en agencia, eso es Cárbula, acompañarlo durante todo el proceso tratando de obtener un mejor negocio desde lo económico para el vendedor, acelerando los trámites, acelerando los procesos, llevando tranquilidad y tiempo, porque nos metemos a hacer toda la gestión de ese proceso que consideramos bastante engorroso”, agregaba el co-fundador de Cárbula.
En 2019 esta prometedora empresa, empezaba a tomar presencia en la escena local, siendo seleccionada por una aceleradora de negocios de la provincia. En poco tiempo dio un salto mucho grande, ya que Startup-Chile, una de las aceleradoras de negocios más grandes Latinoamérica, los escogería de entre miles de aplicantes.
“En julio de 2019 fuimos seleccionados por Startup-Chile. Ese mismo mes nos fuimos a Santiago de Chile, ahí replicamos el modelo Cárbula en otro país. En octubre sacamos la primera beta en el mercado de Santiago de Chile, puntualmente en la Región Metropolitana, justo cuando comienza el estallido social en Chile” explicó Martín.
Con todo un panorama en extremo negativo, Cárbula logró afianzarse y empezar a hacerse notar en el vecino país, al punto de alcanzar, a través de su plataforma, un millón de dólares en transacciones de vehículos.
El panorama de la empresa tenía un empuje único, pero el 2020 le tenía deparado a la empresa y a prácticamente todo el mundo algo peor: una pandemia. Según relataba Martín, luego de los buenos resultados en Chile, tenían planeado salir a la búsqueda de ronda de inversiones mayores, pero el COVID-19 los mantuvo en estado letargo por varias semanas. Pero como dice el dicho “no hay mal que por bien no venga”, la pandemia sacó lo mejor del tipo de modelo de negocios que Cárbula utiliza.
“Del mismo modo que Airbnb tiene muchos metros cuadrados alrededor del mundo y no posee ninguno, nuestra idea es la misma, poder administrar una gran cantidad de autos sin tener que poner un peso en comprar esos vehículos. Entendemos que la tendencia de la industria a nivel global va a hablar más del servicio del auto que del producto en sí mismo. No lo estamos inventando nosotros, solamente estamos mirando lo que pasa en otras latitudes” detalló el entrevistado.
Criterio de selección
No todos los vehículos pueden ser parte de la cartera de Cárbula, para poder serlo es necesario tener ciertos requisitos.
Esta empresa cuenta con una serie de protocolos para aceptar vehículos, por ejemplo, se trabaja con autos que no tengan más de 10 años de antigüedad, que no tengan más de dos dueños, que tengan buen estado estético y además deben superar una inspección vehicular.
“Una persona nos dice que quiere vender su auto. Antes de aceptar, enviamos a un inspector a domicilio, con distintas herramientas para inspección vehicular y con un protocolo que revisa al vehículo en cerca de 200 puntos. Si pasa nuestra inspección, se sube a la plataforma”, ejemplificaba Mariano.
Algo que quiso dejar claro el co-fundador de Cárbula, es que la empresa no compite con otros portales, como De Ruedas o Mercado Libre, de hecho, estos son aliados estratégicos. Cárbula utiliza el llamado “dual posting”, ya que publican en esos portales y de esa manera acaparan y mantienen conversaciones con interesados en comprar.
Con esta forma de trabajo, Cárbula busca la venta rápida, no quiere que el vehículo esté más de un mes en oferta. “Queremos ser los mejores del mundo en vender rápido. En menos de 30 días tiene que salir el vehículo. Queremos que el dueño se lleve más dinero y no espere 100 días para cerrar un acuerdo” resaltó Martín.
¿Cuáles son los modelos más vendidos?
Sobre los modelos más comercializados y de acuerdo a los que explicaba Martín, estos no difieren mucho de los Top mensuales de usados más vendidos (en Argentina). “No generamos métricas distintas a las de la industria. La Toyota Hilux es un caballo de batalla, Yaris y el Chevrolet Onix también. Diría que los autos que más salen, los que llamamos ‘seminuevos’, son los que tienen menos de 5 años de antigüedad, menos de 100 mil Km y no tienen más de dos dueños” puntualizó el entrevistado.
El futuro
Cómo comentábamos al principio, esta empresa sigue creciendo y sorteando todos los inconvenientes que se le han presentado.
El entrevistado adelantó que a principios del 2020 sus planes los llevaban a otros lugares como Colombia y Perú, pero debido al estallido de la pandemia el objetivo tuvo que quedar en stand-by. Mientras esto espera, la empresa busca afianzarse más en el mercado chileno y una vez consolidado poder empezar a mirar a otros países en donde el modelo de negocios resulte.
En cuanto a lo local, Martín ve el gran desafío que es Argentina, especialmente por la volatilidad de precios que sufre el país constantemente. Teniendo esto en cuenta trabajarán más duro para mejorar su propuesta de valor.
Entre sus planes figura un nuevo servicio al que llaman “inspección precompra”. Este servicio se activa como respuesta al pedido de muchos usuarios que buscan un determinado modelo de vehículo en el portal y no lo encuentran. De esta manera, Cárbula ejecuta un plan en el que envían a un equipo de revisión para controlar el “vehículo X” que solicitó un usuario. “Como nosotros tenemos el equipo, vamos y certificamos el auto que la persona quiera. Vamos a ‘Cárbulizar’ tu auto, emitiendo el reporte que te va a evitar dolores de cabeza”, agregó Martín.
Finalmente nos adelantó que la responsabilidad con el medio ambiente también será parte de la empresa. Con cada compra que se realice de un vehículo en Cárbula, la empresa va a compensar a la naturaleza, plantando árboles para mitigar la contaminación que generan los vehículos.