La Línea de Alta Tensión Cruz de Piedra, la obra energética más importante de los últimos tiempos en Mendoza, ya está avanzada en un 92% y en los próximos meses funcionará a pleno, para dar previsibilidad y garantía de servicio. Proyectada hace más de 40 años, el Gobierno de Mendoza tomó la determinación de concretar para evitar un colapso y dar seguridad ante la creciente demanda.
Hoy se realiza con una inversión de U$S 20 millones y el financiamiento del Fondo Fiduciario del Plan de Infraestructura Eléctrica de Alta Tensión de Zonas Aisladas y en Desarrollo (FOPIATZAD).
Hasta ahora, el sistema eléctrico provincial tenía instalados 1.500 megavatios de potencia total y esta línea casi duplicará la capacidad, lo que dará mejor respuesta y operatividad frente a picos de demanda, fallas del sistema de generación en Mendoza y en provincias vecinas.
“Esto significa evitar los cortes que hemos tenido anteriormente por falta de flexibilidad y capacidad de despacho de sistema de transporte”, explicó, en un recorrido por la obra, la ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre.
“La Provincia ha puesto recursos para que esta línea de transporte pueda brindar seguridad no solo a Mendoza, sino también a vecinas como San Juan. La obra está al 92% y en los próximos meses, vamos a tener conexión total, lo que va a permitir evacuar también la generación que viene de hidroeléctricas del Sur, como Agua del Toro, a través de 22 kilómetros de línea de alta tensión”, agregó la ministra.
“La incorporación de la obra LAT 220 kV Doble Terna entre la ET Cruz de Piedra (Maipú) con la ET Gran Mendoza (Junín), permite mejorar la confiabilidad de la red”, explicó Latorre.
Además de distribuir energía limpia con generación cero de Co2, cubrirá la demanda creciente durante picos de verano e invierno e incrementará la seguridad, calidad y confiabilidad de un sistema que se encuentra en riesgo de colapso desde hace tiempo.
Energía limpia y construcción de vanguardia
La Línea de Alta Tensión Cruz de Piedra – Gran Mendoza comenzó a planificarse hace 40 años, cuando todavía existía Agua y Energía SE. La Empresa Mendocina de Energía (EMESA), a pedido del Gobierno de Mendoza, reflotó el proyecto para mejorar la distribución ante la creciente demanda.
Cabe recordar que las provincias de Mendoza y San Juan se vinculan eléctricamente con el Sistema Nacional en tres puntos: ET Gran Mendoza, ET Nueva San Juan y ET Río Diamante. En el primer punto, trascendental para esta obra, la conexión eléctrica se realiza a través de una doble terna de 132 KV, entre Gran Mendoza y Cruz de Piedra.
“En caso de no contar con la generación local, ya sea por restricciones en el suministro de gas o cualquier otra causa que implique indisponibilidad de la misma, se iban a producir restricciones en el abastecimiento eléctrico del área”, explicó Latorre.
Esto se traduciría en un colapso total del sistema para la provincia de Mendoza, que se evita con esta obra para cubrir los picos de demanda en verano y en invierno. Además, la concreción de Cruz de Piedra permitirá instalar en un futuro dos nuevas ET en Mendoza Norte y Capiz, aportando al área mayor potencia desde el sistema de 500 kV a un costo bajo.
Esta obra se construyó con los más altos estándares, con torres de acero cuya altura oscila entre los 40 y 45 m de alto y sistema de doble cadena en “v”, lo que baja la afectación a los propietarios de los terrenos por donde pasa la línea y reduce el ancho de la franja de afectación (Servidumbre).