También participaron las familias que vivirán en estas soluciones habitacionales. Por ejemplo, Juan Vera, contó que “vine a colaborar para construir mi casa, me siento feliz porque vamos a tener algo con qué empezar. Esto nos ayuda a cambiar, para progresar y a tener lo nuestro”.
Giuliana Hernández, voluntaria de la sede Techo de Neuquén – Río Negro, analizó que la meta de estas iniciativas es “mejorar de calidad de la vida de personas que viven en asentamientos”.
Techo es una organización social (ONG) que tiene presencia en 19 países de Latinoamérica. Por eso, trabaja junto a sus jóvenes voluntarios en barrios populares, llevan adelante y acompañan proyectos comunitarios. “En esta ocasión estamos acompañando a la Municipalidad de Godoy Cruz y siendo proveedores de viviendas de emergencia”, amplió.
Las viviendas de emergencia construidas, en este caso en la Isla del Campo Papa, son 11. Se trata de módulos de madera de 6 x 3 metros. Del mismo modo, tiene anexado un módulo sanitario, que es baño y cocina. Por último, se proveé el kit eléctrico para la conexión a ese servicio.
"Acompañar a los vecinos y vecinas de la Mesa de Trabajo es una de las cosas que más disfruto en mi día a día. Ir al barrio, encontrarme con quienes participan del espacio y entre todos y todas pensar soluciones para los problemas que existen, pero también compartir , conocernos y formar un equipo, tienen un impacto muy positivo en mi vida: no solo logro poner al servicio mis conocimientos y experiencias, sino también aprender de las demás personas que participan. Creo que en esa construcción popular de saber está la verdadera transformación hacia una sociedad más justa" explica la voluntaria Gabriela Arrastúa.