En un hecho que marca un hito en la política económica del gobierno de Javier Milei, la emblemática empresa mendocina IMPSA (Industrias Metalúrgicas Pescarmona) fue privatizada este martes, pasando a manos de la compañía estadounidense ARC Energy. Este traspaso se concreta como la primera privatización del gobierno del presidente Milei, un paso significativo en la agenda de transformación económica impulsada por el nuevo gobierno, y que marca un punto de inflexión en la política industrial del país.
La firma de la transferencia de acciones, que tuvo lugar en las instalaciones de IMPSA en Godoy Cruz, fue testigo de la presencia de autoridades nacionales y provinciales. El acto contó con la participación del secretario de Industria y Comercio de la Nación, Esteban Marzorati; el titular de la Agencia de Transformación de Empresas Públicas, Diego Chaer; y la vicegobernadora de Mendoza, Hebe Casado, quien encabezó la delegación provincial en ausencia del gobernador Alfredo Cornejo.
Un paso hacia la privatización
La privatización de IMPSA, una de las empresas más importantes de Argentina en el sector industrial, se concretó luego de un proceso que comenzó en octubre de 2024, cuando el Gobierno nacional, a través del Fondo Nacional de Desarrollo Productivo (Fondep), y la provincia de Mendoza, convocaron a licitación para la venta de las acciones clase "C" de la empresa. La oferta de la empresa ARC Energy, que lidera el consorcio IAF, resultó ser la ganadora del proceso.
Este consorcio, especializado en el suministro de equipos para la industria del petróleo y gas, presentó una oferta de capitalización por 27 millones de dólares para garantizar la viabilidad financiera de IMPSA, que se encontraba atravesando una difícil situación económica. El proceso de licitación, que incluyó a accionistas actuales y nuevos oferentes, culminó con la adjudicación del 84,9% de las acciones que pertenecían al Estado nacional y a la provincia de Mendoza.
Un esquema de inversión de 27 millones de dólares
Con la transferencia de acciones ya concretada, ARC Energy comprometió una inversión total de 27 millones de dólares, que se distribuirá en varias etapas durante los próximos años. Los desembolsos se realizarán conforme a un cronograma de pagos detallado, que incluye una primera entrega de 6,75 millones de dólares al momento de la firma del contrato. A continuación, se prevé una serie de pagos adicionales durante los siguientes tres años para capitalizar la empresa y saldar sus deudas, que ascienden a 576 millones de dólares.
Este esfuerzo de capitalización busca garantizar la sostenibilidad de IMPSA, cuyo proceso de privatización se perfila como un modelo para futuras transformaciones en el sector industrial argentino. La empresa estadounidense ARC Energy asumirá la dirección de IMPSA, con la responsabilidad de fortalecer su presencia en los mercados internacionales y recuperar su competitividad en el sector energético.
La primera privatización de la era Milei
El presidente Javier Milei ha señalado en reiteradas ocasiones la importancia de llevar adelante una reforma estructural de la economía argentina, con énfasis en la reducción del tamaño del Estado y la reactivación del sector privado. La privatización de IMPSA es el primer gran paso en ese sentido, simbolizando el inicio de un proceso más amplio de reestructuración y apertura al capital extranjero.
La vicegobernadora de Mendoza, Hebe Casado, celebró la concreción de la privatización y destacó que este proceso se ha desarrollado exitosamente en la provincia de Mendoza. "Es un orgullo que este proceso de privatización haya ocurrido en nuestra provincia. Hemos trabajado intensamente junto a los equipos técnicos del gobierno nacional para hacer posible este resultado. Esto abre las puertas a un nuevo modelo económico, que sin duda será un motor para el desarrollo de Mendoza y del país", afirmó Casado.
El impacto en Mendoza y el país
El impacto de la privatización de IMPSA será significativo tanto para Mendoza como para el resto del país. La vuelta de la empresa al sector privado promete una nueva etapa de crecimiento, generación de empleo y atracción de inversiones, en un contexto económico que requiere de una transformación estructural para superar la crisis que atraviesa el país.
La ministra de Energía y Ambiente de Mendoza, Jimena Latorre, subrayó la importancia de este paso para el futuro de la empresa. "Este es un paso crucial para que IMPSA recupere su capacidad operativa y vuelva a ser competitiva en los mercados internacionales. La privatización no solo aliviará las cargas financieras de la empresa, sino que también permitirá el retorno de la confianza de los inversores en Argentina", señaló Latorre.
Con la privatización de IMPSA y la llegada de ARC Energy, Mendoza se consolida como un actor clave en la reactivación industrial de Argentina, abriendo nuevas oportunidades para el desarrollo económico local y nacional.
*Fuente: Gobierno de Mendoza y Agencia de Transformación de Empresas Públicas*
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