En un marco económico tan inestable, son pocas las maneras que existen de hacer crecer los pesos argentinos y de encontrar una alternativa segura para ganarle a la inflación, todo esto mientras disminuye la capacidad de ahorro.
Entonces, ¿qué hacemos con los pesos? ¿Comprar dólares es la única respuesta? Antes de responder hay que tener en cuenta que, si bien la crisis argentina deviene del derrotero propio del país, también influye el contexto internacional.
Nicolás Suraci, al frente de la consultora SURACI Evolución de Empresas, indica que “a pesar del contexto adverso, existen opciones de inversión que nos pueden ayudar a impulsar nuestros ahorros y protegernos de estos balanceos de la economía local e internacional”.
A tal fin, el experto agrega que “al momento de pensar en activos para potenciar los ahorros, una buena alternativa son las franquicias, de hecho muchos ya se refieren a ellas de una manera informal como ‘dólar franquicia’, del mismo modo que existe el ‘dólar ladrillo’ o ‘dólar soja’”.
“Se trata de aprovechar la cotización de la divisa y sus últimas fluctuaciones. Ya que en la coyuntura en la que estamos, el tipo de cambio va más rápido que la inflación, por lo que pensar en una franquicia realmente conviene. De hecho, se podría decir que el dólar franquicia estaría apreciado, y una inversión en una franquicia que se hace en pesos, termina costando menos que antes, asegura Juan Manuel Contreras, ejecutivo Comercial de SURACI.
Aprovechar ahora
Desde la misma consultora detallan que en general la franquicia -contemplando el equipamiento y maquinaria, sobre todo- es un bien que no se deprecia tanto, e incluso en algunos casos se aprecia. Con una correcta gestión del franquiciado, podría no fluctuar, es decir, no sube ni baja; por el contrario “sobre todo si se ha desarrollado una buena cartera de clientes y un posicionamiento de marca, lo que hace que después pueda venderse a un valor mayor toda vez que el franquiciado se lo haya agregado”.
El economista y columnista de CNN Radio, José Vargas, de la consultora Evaluecon, explicó que “la franquicia siempre es una buena opción, porque adelanta los tiempos en todo lo que tiene que ver con reputación y posicionamiento en el mercado, por lo que con una economía tan inestable como la argentina, y de un contexto sumamente inflacionario, esa espera puede ser terrible para un emprendimiento que recién comienza”.